LOS INTOLERANTES E IMPUNES GOBERNANTES
*Los yucatecos son gente de bien y trabajo, honesta y pacífica, ¿por qué tienen que reprimirla a macanazos cuando exigen sus derechos a quienes los gobiernan?
*Mauricio Vila y Renán Barrera ya perdieron el piso, el primero porque piensa que puede ser candidato a la Presidencia de la República, el segundo porque cree que puede ser candidato y luego gobernador de Yucatán
*La inutilidad de sus gobiernos, no puede ser reemplazada con la intolerancia y la represión de la gente cuando les reclaman el trabajo que no han hecho y al que se comprometieron
Redacción/Sol Yucatán
El pueblo yucateco se ha distinguido a través de sus años por su amabilidad, por su manera de vivir y buscar la felicidad siempre, son amables y han mantenido el respeto por las tradiciones y las leyes.
Pero también sus raíces mayas los hacen tener convicciones y luchar por ellas, exigir sus derechos y ser siempre gente de paz.
Sin embargo, en los últimos años, un poco más de cuatro años para ser exactos, ese modelo de vida ha cambiado un poco, o tal vez mucho. Sus derechos civiles, sus derechos humanos, sus derechos laborales han sido violentados, han sido mancillados y pisoteados sin miramiento.
Y ese atropello viene desde el autoritarismo del gobierno tanto local en la capital yucateca, como estatal.
La intolerancia ya es inocultable, insoportable y en crecimiento desde que gobiernan Mauricio Vila y Renán Barrera.
No es un dicho, no se trata de una crítica periodística, hay acciones alarmantes desde el gobierno que evidencian el maltrato a la gente, y principalmente denota lo intolerantes y autoritarios que son el gobernador y el alcalde de Yucatán.
Ninguno de los dos pueden arremeter a palos contra la gente, contra lo ciudadanos que exigen sus derechos porque pagan sus impuestos, porque piden un buen gobierno, porque claman por obras públicas, porque gritan por apoyos sociales, porque urgen el respeto a los derechos humanos consagrados en la Constitución mexicana.
Y es que ven pasar los recursos públicos de mano en mano, entre amigos de los gobernantes, ven cómo se hacen negocios al amparo del poder, ven cómo la delincuencia y la impunidad van creciendo en sus colonias, en sus comunidades, en sus comisarías y municipios donde eso no existía por convicción y por costumbre de saber vivir y respetarse unos a otros.
Ahora resulta que Mauricio Vila ordena reprimir a los que protestan utilizando su ariete desde la Secretaría de Seguridad Pública: el comandante Luis Saidén, que por años ha mantenido el orden en la entidad y mantenía el respeto de la ciudadanía, ahora manda policías vestido de civil para golpear, amedrentar, asustar, detener y torturar a los que protestan y demandan sus derechos; ¿En qué momento el comandante se dejó influenciar? Todavía recordamos el primer informe de gobierno del Ejecutivo estatal, cuando pensionados, jubilados, maestros y empleados de gobierno marcharon para pedir que no los corrieran de sus puestos de trabajo, para que no les cobraran más impuestos, y fueron reprimidos con gases lacrimógenos que lastimaron a muchos menores que acudían con sus padres, era un domingo familiar.
Con el paso de los mas de cuatro años de gobierno de Vila, la represión ya es la forma de gobernar frente a la falta de resultados y la inutilidad de un gobierno que solamente llegó a hacer negocios con sus amigos, cada vez más ricos, mientras la gente de a pie, cada vez es más pobre, eso de que hay más empleos que en otra parte del país, es una falacia, porque de nada sirve y muchos no los toman si te pagan una miseria y te quieren casi de esclavo, con la complacencia del secretario de Fomento Económico y Trabajo, Ernesto Herrera Novelo, que se ganó una Notaría por su servilismo.
Ya ni las formas oculta Vila para premiar a sus incondicionales. ¡Regalarle una Notaría a su secretario del Trabajo! Y es que es el gobernador quien decide a los notarios, así es la ley.
¿Hasta dónde va a llegar Vila?
¿Renán quiere ser una copia barata de Vila?
¿O los dos son cortados por la misma tijera y no sabemos quién es peor que el otro, más intolerante y más autoritario? ¿Quién es más clasista? ¿Quién es la copia barata del otro?
En Yucatán más de la mitad de la población sobrevive en la pobreza y pobreza extrema, y hay un puñado, exactamente un puñado, de ricos muy ricos entre los que destacan políticos de todos los niveles y funcionarios, algunos en activo, otros en la banca esperando su turno para batear el presupuesto público; y de la mano de ellos sus patrocinadores, sus socios, sus parientes.
Tanto Vila como Renán tienen hermanos incómodos, bueno, incómodos para la sociedad, pero altamente rentables para ellos, porque son los que hacen los negocios, los que disponen del presupuesto y los que dicen quién va y quien no va en los contratos. La gente lo sabe y se tienen que cuadrar ante ellos, si quieren un pedazo de presupuesto a través de un contrato como proveedores.
¿De qué se trata?
¿Por qué Renán Barrera puede mancillar a la gente de las comisarías que le exige sus derechos?
En la alcaldía de Mérida, el principal edil ya no oculta tampoco su desprecio a la gente que con engaños votaron por él, ahora los reprime cuando le piden ayuda y cómo no la otorga porque tiene compromisos de negocios con sus patrocinadores, pues mejor los intimida usando también a la policía.
Hay decenas de inconformes en las comisarías, no hay obra pública, no hay apoyos sociales, no hay inversiones productivas.
¿Qué ha hecho Renán con unos 20,000 millones de pesos desde que es alcalde de Mérida en 3 periodos ya casi 9 años?
Conste que ya vienen las elecciones.