Redacción / Sol Yucatán
El proyecto de las calesas eléctricas, del alcalde panista Renán Barrera Concha, está ahorcando a los caleseros que migraron a esta modalidad y adquirieron uno de estos vehículos.
En entrevista con Sol Yucatán, los prestadores del servicio aseguran que a 11 meses de que comenzaron a operar el crédito resulta impagable.
Señalan que han tenido una baja demanda, porque los turistas no les interesa subirse a un vehículo motorizado y prefieren ocupar a las calesas jaladas por caballos o el Turibus, a pesar de que los primeros cuestan más del doble que las eléctricas.
José Luis H.M., dijo que al día tiene como máximo tres viajes, lo que es insuficiente para pagar los casi 11 mil 923 pesos mensuales del subsidio.
“El Ayuntamiento nos vendió la idea de un gran negocio, pero fue un engaño”, dijo.
En julio del año pasado, los vehículos eléctricos comenzaron a operar y se les otorgó a algunos caleseros, quienes tienen que pagar 286 mil 152 pesos en 24 meses. El costo total de cada vehículo es de 485 mil pesos, prácticamente lo mismo que un automóvil nuevo.
