- Desde Ticul, Oxkutzcab, Tekax, Akil, Tzucacab y Peto que se ha convertido en un corredor de la droga en el sur del estado, hasta el oriente en la ruta de Valladolid, Tizimín, Panabá, Espita, Chemax está bajo el dominio del narcotráfico.
- Hoy el temor de las familias no solo es que sus hijos caigan en las drogas, sino también que sean enganchados para vender y ganar dinero ilícito, por la falta de oportunidades laborales
Redacción / Sol Yucatán
Mérida.- Los alcaldes de los municipios del Estado de Yucatán han demostrado negligencia para enfrentar el alarmante crecimiento del consumo de droga y del aumento del narcomenudeo, como por ejemplo en los municipios del sur del Estado, en donde sustancias muy peligrosas como el cristal son distribuidas y consumidas con total impunidad, lo que preocupa a los habitantes que temen que los jóvenes sean seducidos, tanto para consumir, como incluso para comercializar los narcóticos.
En Ticul, gobernado por el alcalde panista Rafael Gerardo Montalvo Mata, hay laboratorios donde se elabora principalmente el cristal, muy consumido en este municipio
Además los municipios vecinos como Tzucacab, gobernado por Freddy Alejandro Carrillo Blanco y Peto, presidido por Renán Jiménez Tah también han sido gravemente afectados, que ha magnificado el fenómeno que permea cada vez a la entidad yucateca.
A este fenómeno social se relacionan el aumento de la delincuencia, la violencia y el alcoholismo, situación que ha superado la capacidad de los policías.
Desde Ticul, Oxkutzcab, Tekax, Akil, Tzucacab y Peto que se ha convertido en un corredor de la droga en el sur del estado, hasta el oriente en la ruta de Valladolid, Tizimín, Panabá, Espita, Chemax está bajo el dominio del narcotráfico.
En el Oriente se sabe que sicarios ha venido de Quintana Roo a resguardarse por ello con frecuencia hay hechos de violencia con armas de fuego.
Los policías municipales trabajan coludidamente con los vendedores de droga, que ocurre a plena luz del día, sin que ocurra nada, a pesar de las denuncias de los pobladores.
Hoy el temor de las familias, no solo es que sus hijos caigan en las drogas, sino también que sean enganchados para vender y ganar dinero ilícito, por la falta de oportunidades laborales en los municipios, razón por la que muchos de los jóvenes tienen que migrar a otros estados.
El problema del consumo de la droga en los municipios cada ves es más evidente, pues este problema redunda en la violencia y en muchas ocasiones con resultados fatales, pues como le ha informado Sol Yucatán, en mayo pasado, en el municipio de Ticul, Giberto N. mató a su abuela María Jesús S., de 92 años de edad, porque no le quiso dar dinero para comprar su droga.
También en Espita, municipio designado recientemente como “Pueblo Mágico”, el tema del narcomenudeo no pasa desapercibido. Muchos se preguntan como es que se otorgó este nombramiento turístico, pues la alcaldesa panista Martha Eugenia Mena Alcocer, tiene en abandono el municipio, además que es más que evidente el alto consumo del alcohol, gracias a la permisibidad de las autoridades con la venta clandestina.
En Celestún el alcalde José Asunción Ramírez Perera no ha logrado controlar el narcomenudeo, reconocido por los pobladores, quienes conocen bien los puntos de venta en este puerto turístico.
Lamentablemente, cada ves son más los pescadores que a lo largo de su jornada comienzan a padecer los efectos de los estupefacientes que consumen.
El crecimiento de la actividad turística en Celestún ha generado también el aumento del narcomenudeo que cada vez más es evidente el consumo entre los pescadores y servidores turísticos.
Los pobladores manifiestan que han denunciado los puntos de venta del narcotráfico, ante las autoridades, pero que la policía municipal parece estar coludida con estas personas, pues ignoran los reportes, “incluso pareciera que los protegen”.
En el municipio de Hunucmá también la drogadicción y el narcomenudeo van a la alza, sobre todo por ser una demarcación que colinda con Ucú y Tetíz, por lo que es el cruce perfecto para la distribución del narcomenudeo, hecho que pasa sin mayor problema a la vista de las autoridades estatales y municipales.
A pesar de ser un municipio creciente, precisamente por las nuevas carreteras que lo han hecho paso obligado de otros municipios, la alcaldesa morenista, Edna Marisa Franco Ceballos, no ha podido hacerle frente a este problema.
Es común ver a los narcomenudistas vendiendo a plena luz del día, generando temor entre sus vecinos, ya que al ser madre de familia teme por la seguridad de sus hijos, pues nunca se sabrá cuándo habrá un problema entre bandas rivales y se de un enfrentamiento violento.
En Tekantó en las últimas décadas ante la falta de oportunidades laborales, la marginación ha provocado que los pobladores migren y quienes no han podido hacerlo se han tenido que enfrentar a los malos resultados de los gobernantes el municipio, que han permitido que la venta de droga aumente.
Actualmente Tekantó es gobernado por el panista Marbin Erbey Carrillo Sosa, quien no tiene contento a los pobladores por la permisibidad a la delincuencia, que es constantemente denunciada ante el director de la policía municipal, Joaquín Jiménez Moreno, que solo se hace de la vista gorda.
Sol Yucatán ha reportado constantemente la corrupción que existe en el municipio de Tizimín, gracias al alcalde panista Pedro Francisco Couoh Suaste. Este municipio con su principal actividad ganadera no ha pasado desapercibido por los narcomenudistas que se enquistan más entre los pobladores, dejando una estela de violencia e inseguridad que muchas veces no es reportada y que es ocultada por las autoridades.
Los narcomenudistas se pasean por las calles con toda tranquilidad en camionetas de lujo blindadas o con escoltas provocando miedo entre los tizimileños.
En Tizimín se observa la prosperidad de gente foránea quienes llegan a construir grandes casas de lujo, y que con su llegada a este municipio también ha llegado el aumento del narcotráfico, que comienzan a enganchar a los jóvenes para el consumo de la droga.
Este municipio es frontera cercana con el estado de Quintana Roo, lo convierte el oriente en una zona atractiva para la distribución de drogas que ha ocasionado hechos de violencia.
A principios de este año 2023 fue asesinado un hombre a las puetas de su casa, originario de Quintana Roo. Ante estos sucesos, el alcalde Pedro Couoh no incrementó la seguridad policíaca en el poblado, a pesar de que el ejecutado fue agredido a plena luz del día. Valladolid no solo es conocido por ser un polo turístico, por colindar con el municipio de Tinum, donde se encuentra Chichén Itzá, sino también por el auge del narcotráfico, la delincuencia y el robo de automóviles. En este municipio también viven sicarios de Quintana Roo que vienen a esconderse porque son perseguidos por la ley o por sus rivales.




